El campo vuelve a las calles: el sector cerealista protesta por la crisis del grano y exige medidas urgentes al Gobierno

Nueva protesta del campo español, esta vez protagonizada por el sector del cereal, que ha vuelto a alzar la voz frente al Ministerio de Agricultura para denunciar la grave crisis que atraviesan miles de explotaciones. Convocados por Asaja, COAG y UPA, los agricultores exigen medidas inmediatas ante los precios ruinosos, el incremento de costes y las importaciones desleales, especialmente desde Marruecos y Ucrania.

Tres demandas clave

Durante la concentración, los líderes agrarios desgranaron sus tres principales exigencias al Gobierno:

1. Ayudas directas sobre las facturas de fertilizantes para compensar el fuerte encarecimiento de los insumos.

2. Supresión inmediata de los aranceles a la importación de fertilizantes, en particular los procedentes de Rusia.

3. Control real de las importaciones de cereal, exigiendo los mismos estándares para los productos importados que para los nacionales.

“Trabajamos a pérdidas”

El presidente de Asaja, Pedro Barato, denunció que “la supervivencia misma de miles de explotaciones cerealistas está en juego” y cifró el coste por hectárea en más de 800 euros, frente a precios de venta por debajo de 200 euros por tonelada. “No podemos permitir que se siga obligando a trabajar a pérdidas”, subrayó.

Desde COAG, Javier Fatás criticó la especulación financiera:

“Los precios ya no se deciden en nuestros campos, sino en despachos a miles de kilómetros. El agricultor es el eslabón más débil de la cadena”.

Fatás denunció que actualmente se paga el trigo por debajo de 220 €/tonelada, cuando producirlo cuesta más de 250 €, y alertó de un mercado global “distorsionado por intereses financieros”.

Costes disparados y competencia desleal

Ignacio Huertas, de UPA, calificó la situación del cereal como “crítica”, y advirtió de un aumento del 30% en los costes de producción en los últimos años, agravado por la “entrada masiva de cereal de Ucrania” y el alza de los fertilizantes.

“No somos responsables ni de los precios ruinosos ni de los costes descontrolados”, sentenció.

Movilizaciones en aumento

Las tres organizaciones advirtieron que, si no se actúa, las protestas se extenderán por toda España y podrían llevarse también a Bruselas, exigiendo una respuesta a nivel europeo ante los efectos del Pacto Verde Europeo y la falta de protección frente a la competencia exterior sin controles equivalentes.